martes, 5 de febrero de 2013

Hezbollah - Irán - Siria: extraños maridajes

El ministro de Defensa, Ehud Barak, confirmó que su país está detrás del ataque aéreo a un convoy sirio, que transportaba armas antiaéreas que, supuestamente, eran para el grupo militante libanés Hezbollah.Barak ha hecho estos comentarios en una reunión con diplomáticos y funcionarios del ministerio Defensa, en Múnich. El gobierno sirio difundió imágenes de lo que afirma es el resultado del ataque aéreo israelí que, según Siria, tenía como objetivo un centro de investigación cerca de Damasco. Al parecer, el ataque aéreo ha destruido coches, camiones y vehículos militares. Barak ha dicho que el gobierno sirio apenas tiene poder, y que el presidente sirio Bashar al-Assad pronto caerá. "Admito que estoy preocupado por todo lo que mencioné. Lo más inmediato e inminente es, espero, la caída del poder del presidente sirio Bashar al-Assad, el joven Assad. Será un duro golpe para los iraníes y para Hezbollah. Esto va a suceder, muy pronto” En la misma conferencia, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Ali Akbar Salehi dijo que Israel no podía darse el lujo de ignorar a su país, y que Teherán está listo para conversar, lo que estabilizaría la región. "No tenemos ningún límite para las negociaciones bilaterales, cuando se trata de negociar los aspectos de un determinado tema. Si el tema es la cuestión nuclear, sí, estamos listos para hablar, pero tenemos que asegurarnos que la otra parte tiene la verdadera intención de negociar. Nos guste o no, lo reconozcamos o no, jugamos un papel en la región, y me gustaría decir que somos la clave para la región". Barak subió la apuesta y dijo que, el apoyo iraní a Hezbollah forma parte de una política más amplia de Teherán para desestabilizar la región, y es la prueba de que Irán no está tan interesado en la paz. "¿Por qué los iraníes le apoyan a Assad? No podemos entenderlo. Lo apoyaron. Hezbollah lo apoya y sufrirán un duro golpe". En la misma conferencia, el vicepresidente Joe Biden ha dicho que Estados Unidos está dispuesto a hablar con Irán, pero que Teherán debe demostrar que va en serio, y que Washington no se comprometerá con los iraníes a menos que las negociaciones den resultados.